sábado, 28 de julio de 2018

1 AÑO SIN MI MAMÁ



Hace un año que te fuiste y no, aun no encuentro como extrañarte menos, aun no puedo hablar de ti sin tener que hacer pausas, siempre necesito tomarme un tiempo para que no se inunden mis ojos y tomar aire para poder seguir.

Tu recamara, esa que habitaste los últimos meses en mi casa, a veces me golpea con tu olor, aun estás presente para nosotros, porque sigue siendo la recamara de Yayis, aunque ciertamente ya estamos empezando las reformas, es necesario soltarte y dejarte ir.

Las niñas siguen sin entender porque no vas a regresar y yo tengo que amarrarme las entrañas, respiar profundo y desanudarme la garganta para poder explicarles que tu estás bien donde estás, me esfuerzo por hacer que mis palabras las calmen, lucho por convencerlas y convencerme a mi misma que todo está bien...siempre logro hacer que se serenen, pero en un ejercicio de honestidad, no siempre lo logro conmigo misma.

La última vez nos pusimos a ver tus fotos y ver videos  para que escucharan tu voz, deberías de haber visto sus caritas cuando te escucharon, vuelven a sonreir de inmediato y hasta se pusieron a cantar el chorrito "contigo" y entonces estuvieron bien.

Regina me pregunta ahora, como es el lugar donde estás y está convencida que es un lugar de colores como la película de Coco, yo a mis 41 años, espero que así sea, que estés en un lugar alegre, que hayas encontrado paz, que estés contenta y sonriendo y sobretodo que ya no sufras.

Yo, yo simplemente a veces no se como componerme, te extraño y te extraño, y conforme van pasando los días me voy dando cuenta que hubo muchas cosas que no te pregunté, creo que tendré que ir encontrando mis propias respuestas con el paso de mi propia vida. 

No se si algún día dejen de hacerme falta tus abrazos, daría todo, todo, todo lo que hoy tengo, por un día mas contigo y mi Papá, a nada me sabe haber podido liquidar mis deudas si lo que ahora tengo a manos llenas es tu ausencia.

Me conoces, sabes que puedo con esto y que cada día voy saliendo adelante, sabes que sonrío fácilmente y que necesito poco para ser feliz, estoy segura que nunca dejarán de hacerme falta tu y mi Papá, se que no voy a extrañarte menos, pero voy aprendiendo a vivir con sus ausencias y tratando todos los días de ser una mejor persona para mis niñas.

Sabes, estos 365 días, he cambiado, he aprendido, me he hecho mas fuerte, he crecido internamente y físicamente también...(mi cabello ahora es muy blanco), estoy segura que todo seguirá mejorando con los días, las niñas irán asimilando mas las cosas y yo un día, no se cuando,  me voy a dar cuenta que aprendí a extrañarte sin que me duela!


Te quiero Ma.