domingo, 3 de junio de 2018

CERRANDO PUERTAS



El Pollo, osea,el guey con el comparto ADN y yo, cerramos la era de Balbuena Vera 59, nos llevamos todas las cajas llenas de recuerdos, de nostalgia, de extrañamientos y de todo lo que vivimos en familia, le dejamos mucho espacio a los que próximamente vivirán ahí, para que la llene de sueños y aventuras nuevas.

Han sido días difíciles, días de soltar, de cerrar ciclos, de llorar y de reír con todos los recuerdos que se fueron apareciendo uno a uno golpeándonos en la cara y en nuestros corazones.

El fin de semana estuvo bastante atropellado, buscandole nuevos dueños a todo lo que no podíamos llevarnos, no tuvimos tiempo para planear nada, solo hubo que hacerlo y ya.

Así que dejamos  de pensar y de sentir porque no había tiempo para eso... por momentos me detuve a respirar varias veces y soltar en mi mente los hilitos que te atan a las "cosas"...esos hilitos que traen recuerdos pegados, detenerme a respirar como me enseñaron esos dos que están en el cielo...respirar y volver a respirar... "solo son cosas" me repetí varias veces y mentalmente metí mis recuerdos a mi cajita invisible, permitiendo que lo material se fuera a casa de alguien mas...

Tuvimos ratos para recordar muchas cosas, como fue llegar  a vivir ahí con la casa a medio terminar, y lo bien que nos vino a nosotros dos porque teníamos mas espacio para jugar. Cada  mejora a la casa, como las puertas de los closets, se celebraba con bombo y platillo, espiar  las fiestas de nuestros papás desde la escalera, nuestros escondites, las largas horas preparando mi tesis...todos los colores que tuvieron las paredes de mi cuarto, como disfrutaban nuestros papás estar en la cocina....risas al encontrar algunas ocurrencias de nuestros progenitores...juguetes de nuestra infancia, los shows que armábamos en el comedor, las caídas y accidentes de mi hermano, las carreritas en la escalera, la música de rock and roll, la comida deliciosa de mi Mamá y sus miles de utensilios que aun estaban guardados, como esperándola para preparar alguna comida con la que siempre nos hacía felices, los dibujos de mi Papa, su colección de plumas, las cenas en familia, mis XV, toooodas las fiestas, los preparativos de mi boda, sus amigos y los vecinos que tanto disfrutaban lo buenos anfitriones que eran mis Gordos, fotos de tiempos, que como bien dice la frase: "no volverán"... libros, libros y mas libros, el olor de "ellos" que seguía impregnado en las paredes, el patio, las plantas, la textura de las paredes...tanto y tanto....

Al final lloramos juntos, no hubiera podido hacer esto sin ti hermano., nos abrazamos y caminamos por la que ya no será mas nuestra casa, por la que fue nuestro refugio en buenos y malos tiempos, donde mis papás nos enseñaron a ser 4 contra todo, donde vivimos lo que nos enseñó a ser lo que ahora somos...

Suspiré fuerte, muy fuerte, se me hizo un nudo en la garganta, otro nudo más de esos que vengo coleccionando hace más de 6 años y cerré por última vez “La casa de mis Papás”, que después fue “La casa de los abuelos” y luego sólo “La casa de Yayis”....mi casa con muchos nombres...  y me fuí sin mirar atrás...

Para mi este ha sido uno de los episodios mas difíciles en el proceso de "dejarlos ir"...ha sido casi como terminar de enterrar a ese par a quien tanto extraño y que tanta falta me hace y a riesgo de sonar muy dramática (me vale, es mi blog), es otro derechazo en el hígado del que se que con el paso del tiempo iré superando...

Así es esto...